LUCHANDO CONTRA LA VELUTINA
A lo largo de estos años hemos acumulado mucha experiencia en la lucha contra la avispa velutina, lo que nos permite desarrollar constantemente nuevos equipos y mejorar los existentes, además es fundamental realizar un buen manejo en el apiario para obtener unos resultados satisfactorios.
Una buena práctica en el uso de los equipos puede convertir lo que es una auténtica pesadilla para los apicultores y por supuesto para las abejas en un problema asumible que mantenga controlado a este insecto y por tanto que permita un desarrollo prácticamente normal de las colmenas a lo largo de todo el año.
Para ello queremos poner a disposición de nuestros clientes toda nuestra experiencia acumulada.
El año pasado la Universidad de Barcelona, publicó un estudio en el que constataban que hoy por hoy el sistema más eficiente para la lucha contra la velutina son las arpas, para dicho estudio la Universidad ha contado con arpas y equipos SANVE.
https://www.lavozdegalicia.es/noticia/galicia/2021/05/24/investigacion-responsabiliza-velutina-tercera-parte-muertes-abejas/0003_202105G24P6991.htm
En el ciclo vital de la velutina podemos diferenciar tres fases de actuación bien definidas a lo largo de toda la temporada, en cada una de ellas la actuación debe ser diferente y de ello dependerá la efectividad de los equipos y por tanto el resultado de nuestro trabajo.
Las fases son las siguientes:
1.- Primavera
2.- Verano
3.- Otoño
No especificamos fechas muy concretas pues el desarrollo de esta especie es sensiblemente diferente de unas zonas a otras dependiendo del clima y la altura a la que se encuentren los apiarios y si es costa o interior, etc. pero en general estas tres etapas se corresponden con las tres fases principales del desarrollo del avispón asiático velutina, que son: la salida de la invernación de las fundadoras en primavera, el desarrollo de los nidos primario y secundario en verano y al final, en otoño, el colapso de los nidos y suelta de las nuevas fundadoras que superaran el invierno y crearán una nueva generación de individuos al año siguiente.
Una buena práctica en el uso de los equipos puede convertir lo que es una auténtica pesadilla para los apicultores y por supuesto para las abejas en un problema asumible que mantenga controlado a este insecto y por tanto que permita un desarrollo prácticamente normal de las colmenas a lo largo de todo el año.
Para ello queremos poner a disposición de nuestros clientes toda nuestra experiencia acumulada.
El año pasado la Universidad de Barcelona, publicó un estudio en el que constataban que hoy por hoy el sistema más eficiente para la lucha contra la velutina son las arpas, para dicho estudio la Universidad ha contado con arpas y equipos SANVE.
https://www.lavozdegalicia.es/noticia/galicia/2021/05/24/investigacion-responsabiliza-velutina-tercera-parte-muertes-abejas/0003_202105G24P6991.htm
En el ciclo vital de la velutina podemos diferenciar tres fases de actuación bien definidas a lo largo de toda la temporada, en cada una de ellas la actuación debe ser diferente y de ello dependerá la efectividad de los equipos y por tanto el resultado de nuestro trabajo.
Las fases son las siguientes:
1.- Primavera
2.- Verano
3.- Otoño
No especificamos fechas muy concretas pues el desarrollo de esta especie es sensiblemente diferente de unas zonas a otras dependiendo del clima y la altura a la que se encuentren los apiarios y si es costa o interior, etc. pero en general estas tres etapas se corresponden con las tres fases principales del desarrollo del avispón asiático velutina, que son: la salida de la invernación de las fundadoras en primavera, el desarrollo de los nidos primario y secundario en verano y al final, en otoño, el colapso de los nidos y suelta de las nuevas fundadoras que superaran el invierno y crearán una nueva generación de individuos al año siguiente.
Investigadores de la Universidad de Barcelona durante un estudio que duró dos años, confirmó la eficacia de las arpas en el control de la avispa velutina
|
Primavera
Durante la primavera lo más recomendable es colocar los desinsectadores con el atrayente en el apiario alejados de las piqueras, con el fin de atrapar a aquellas velutinas que pueden estar construyendo sus nidos cerca del apiario, si no dispone de desinsectadores tambien se pueden usar las típicas trampas de botella, aunque estas son mucho menos selectivas que los desinsectadores, pero nos pueden ayudar en esta tarea, las botellas también se pueden poner en zonas algo alejadas, en un radio de aproximadamente 500 m. del apiario.
No es necesario poner muchas, una en el apiario y si puede ser cuatro rodeando el apiario a una distancia en radio de unos 500 - 700 m. No es necesario poner más, pero lo que sí es importante es mantenerlas toda la primavera y visitarlas a poder ser cada semana para vaciar y reponer atrayente. Con ello lo que pretendemos es intentar que en las zonas más cercanas al apiario haya los menos nidos posibles ya que serán los que más daño nos causarán. |
Verano
Colocación en paraleloColocación en alas |
A mediados de verano, en julio aproximadamente, ya que, como decíamos, esto puede variar de unas zonas a otras, es cuando debemos colocar las arpas y los desinsectadores en su posición, en paralelo con las piqueras.
En este momento se debe sacar del apiario cualquier tipo de atrayente de velutinas. Es muy habitual ver en los apiarios numerosas botellas con atrayente junto con las arpas y otros sistemas para cazar avispas durante toda la temporada, nosotros desaconsejamos totalmente este procedimiento, lo único que conseguimos con el atrayente en verano es hacer de nuestro apiario un auténtico campo de batalla. Como decimos las arpas deben ser colocadas mucho antes de ver las primeras obreras cazando frente a las piqueras. Le sorprenderá ver cómo al final del día se encontrará con varias velutinas cazadas en las trampas sin que usted haya visto ninguna volando por el apiario. Nuestra experiencia nos indica que es fundamental actuar tempranamente para evitar el rápido desarrollo de los nidos que en estas fechas empieza a ser exponencial. Los nidos, a estas alturas del año, son incipientes y están en la situación más vulnerable de su desarrollo ya que contarán con unas pocas obreras que empiezan a ayudar a la reina a alimentar a la prole y desarrollar su nido, si conseguimos mermar las escasas unidades de obreras en estos momentos, vamos a reducir drásticamente el crecimiento del nido y mismo podemos obligar a la reina a salir a buscar alimento, ya que sus obreras no vuelven, de esta forma, además, aumentamos la posibilidad de cazar a la propia reina en uno de esos viajes, si esto sucede eliminaremos el nido por completo. Esta acción es fundamental para un control efectivo de los nidos a lo largo de los próximos meses y por tanto de la plaga, por ello decimos que, vale más una obrera capturada en junio que cien en agosto. Las avispas obreras salen del nido con roles distintos al igual que las abejas, unas salen a buscar proteína (abejas y otros insectos) para alimentar a la cría, otras salen a la búsqueda de néctar (hidratos de carbono), para alimentar a las que trabajan en el nido, mientras otras transportan materiales para su construcción. Si mantenemos el atrayente en el apiario juntaremos a todas ellas alrededor de nuestras colmenas unas buscando azúcares o materiales pero que tambien necesitan alimentarse y otras buscando abejas, entre unas y otras crean un gran alboroto en el apiario y una situación de estrés a las abejas, que debemos evitar. Lo que perseguimos es un apiario sin ninguna avispa y cada una que lo encuentre, debemos hacer lo posible para que durante el día acabe cazada en una de nuestras arpas, obligando así a la reina a tener que salir en busca de alimento para su prole. Si conseguimos esto, tendremos a nuestro alrededor unos nidos pequeños con escasas obreras y poca cría desnutrida. Nosotros no somos partidarios de poner delante de la piquera ningún dispositivo que interfiera en la normal salida y llegada de las abejas en su incansable trabajo, estos dispositivos obligan a las abejas a frenar su vuelo mucho antes de lo necesario para aterrizar en la piquera por lo que las velutinas se colocarán tambien antes y por tanto las abejas no solo tienen que sortear a las velutinas sino que además, luego, nuestros artilugios. Nuestro objetivo no debe ser dificultar a las velutinas que cazen a las abejas sino: 1.- Evitar que los nidos desarrollen gran cantidad de velutina y 2.- Cazar a cualquier velutina que encuentre el apiario lo antes posible. Por tanto la primera regla de oro es adelantarnos al desarrollo de los nidos, la velutina más fácil de cazar es la que evitemos que nazca y ese debe ser nuestro principal objetivo, estamos acostumbrados a poner las arpas cuando vemos varias velutinas en frente de cada piquera y entonces el problema será más difícil de gestionar ya que las avispas nos llevarán mucha ventaja. Decíamos que no somos partidarios de colocar sistemas que impidan un acceso directo de las abejas a la piquera pero es importante complementar la eficacia de las arpas con elementos que interrumpan la normal circulación de las avispas, obligandolas a pasar por las arpas, unos palets a una distancia adecuada es suficiente, (ver dibujos adjuntos). Generalmente las abejas que están trabajando entran y salen de la colmena en un vuelo ascendente o descendente de 35 grados que debe estar totalmente libre. Las velutinas, por el contrario, se mueven en un vuelo rasante y circular alrededor de la colmena y entre piqueras, con una buena disposición de unos elementos simples obligaremos a las velutinas a que elijan la apertura de las arpas para acceder a la piquera y tambien para salir especialmente cuando salen con el sobrepeso de una abeja cazada. Son pequeñas cosas que mejorarán considerablemente la eficacia de los dispositivos de caza. Debemos fijarnos tambien cual es el camino de entrada preferente de las avispas en nuestro apiario y tambien el de salida y disponer los elementos acorde a dicha situación. Algunos clientes nos envían fotos del resultado de la aplicación de las arpas en sus apiarios, después de haber probado todos los sistemas posibles, botellas, protectores de piquera etc, etc. sin resultados significativos, en tan solo dos días despues de la colocación de las arpas, todo el problema reposa a las bandejas de nuestras arpas. |
MUY IMPORTANTE
Los apicultores tienden a colocar las arpas muy cerca de las piqueras y eso es un error
Solo debe haber en el agua unas 4 o 5 abejas por cada 100 velutinas
Otoño
A principio del otoño los nidos colapsan y liberan las reinas que serán las encargadas de ivernar y producir la siguiente generación del próximo año.
Lo notaremos fácilmente en nuestro apiario ya que al no haber cría en los nidos las avispas no necesitan proteína para alimentarlas y tan solo se dedican a merodear por el apiario en busca de alimento dulce, néctar y miel, especialmente las reinas que necesitan alimentarse y fortalecerse para pasar el invierno. Habitualmente siempre se habla de cazar las reinas en primavera y no se tiene en cuenta esta labor en otoño. Nosotros creemos que la mejor época para la caza de las reinas es precisamente el otoño, por varias razones, la primera es que a diferencia de la primavera donde las velutinas irán saliendo de la hibernación escalonadamente a lo largo de casi toda la primavera, ahora las tenemos a todas ellas juntas activas y hambrientas por lo que su captura puede ser masiva. Por otra parte, cualquier atrayente que coloquemos en otoño será un oasis en un desierto, pues a diferencia de la primavera donde las trampas deben competir con infinidad de flores y por tanto otras fuentes de alimento, en otoño apenas hay alimento en el campo por lo que las velutinas se comportan como manadas de lobos en busca de cualquiera fuente de alimento. Llegado este momento ya se pueden retirar las arpas del apiario y de nuevo se puede poner atrayente en los desinsectadores, agora colocados nuevamente alejados de las piqueras, los desinsectadores secos son especialmente eficaces para poner en su interior cera de opérculo procedente de la cosecha de miel, con ello a la par de alimentar a las abejas, estaremos eliminando las avispas. Cuando veamos que ya no hay zánganos en las colmenas debemos proceder a reducir las piqueras para evitar la entrada de las velutinas en la colmena, esta es una práctica en la que debemos ser muy cuidadosos y comprobar que no hay zánganos en la colmena lo que provocaría la muerte de los zánganos en su interior y creará un tremendo estrés a la colonia. Se aconseja colocar aleatoriamente alguna trampa de piquera especialmente en colmenas que tengamos jóvenes o débiles, ya que, no sólo estaremos impidiendo el saqueo sino que además eliminaremos las velutinas . |